La vitamina C, conocida por nosotros, es asociada comúnmente con determinados alimentos como los cítricos que casi en su mayoría de veces lo relacionamos a prevenir enfermedades como los resfriados. Sin embargo poco sabemos sobre la vitamina C es por eso que ahora hablaremos sobre algunos mitos y verdades.
Se encuentran únicamente en cítricos y en las naranjas.
Siendo los cítricos una excelente fuente de vitamina C estas no son la única opción entre todas las que tenemos ya que podemos resaltar algunas verduras como el brócoli, las espinacas, los pimientos, además de frutas como la fresa o la piña.
Se pierde fácilmente.
La vitamina C es la mas sensible al calor, la luz y el oxigeno pero eso no quiere decir que se pierde con facilidad. Podemos decir que esto sucede cuando un alimento con buena fuente de vitamina C se expone a temperaturas muy altas o por un tiempo muy prolongado además si no lo conservamos en un lugar fresco y donde la luz no llegue de forma directa.
La vitamina C previene y trata los resfriados
La mayoría de investigaciones han mostrado que la ingesta de hasta 3 gramos de vitamina C nos ayudaría a cortar la duración de un resfrió común más no previene en su totalidad los resfríos.
La Vitamina C es responsable de una piel radiante y luminosa
Siendo un poderoso antioxidante aporta luminosidad a la piel del rostro. Tiene la capacidad de transformar la piel cansada, fatigada o con manchas en una piel de aspecto mucho más saludable y conseguir un cutis luminosos y radiante en pocas sesiones.
La Vitamina C es apta para cualquier edad
La Vitamina C puede utilizarse a cualquier edad ya que, por sus múltiples propiedades, tiene la capacidad de dar respuesta a múltiples necesidades de la piel en diferentes momentos. Si bien, es aún más beneficiosa y necesaria cuando la piel envejece y se ve más afectada por los oxidantes y se hace más necesario contar con ingredientes antioxidantes como la Vitamina C.